Osiris, Isis y Horus

Horus, Templo de Hathor en Dendara

Osiris, Señor de los infiernos, era originalmente un rey del mundo terrenal, donde enseñó a los egipcios (y luego al resto del mundo) la vida, la religión y el cultivo de los cereales (anteriormente habían sido canívales). Se lo llamaba Unnefer o el "eternamente bueno". Éste fue asesinado por su celoso hermano, Set, que le engañó para que se metiese en un arcón de madera, que después selló y echó al Nilo. Isis, la esposa de Osiris rescató el cadaver, pero cuando Set volvió a encontrarlo, lo crotó en muchos trozos y desparció los restos por todo Egipto. Afligidas, Isis y su hermana Neftis, fueron recogiendo trozo por trozo y, con la ayuda de Anubis, guía de las almas en el infierno, y de Thot, el escriba de los dioses, lograr recomponer a Osiris, la primera Momia. Isis se transformó a sí misma en un milano y, volando sobre el cuerpo, le infundió la vida con sus alas; en ese momento concibe un hijo, Horus, que ha de vengar a su padre. El resucitado Osiris regresa a la oscuridad y desolación del mundo subterráneo para ser señor y juez de los muertos.

Isis y Osiris

Esta historia, que trata sobre la muerte y la resurrección, refleja los ciclos de la cosecha del cereal y su regeneración a partir de las semillas; en las tumbas egipcias se colocaban figuritas de Osiris llenas de semillas de cereal como compromiso de renacimiento.

por Graciela Paula Caldeiro